
Por Francisco Tavárez
Año tras año, la misma historia vuelve a contarse: escuelas sin pupitres, sin pizarras, con grietas en las paredes y aulas inservibles. Más de 400 centros educativos en estado de colapso y el año escolar a punto de comenzar. Es una realidad vergonzosa que ya no sorprende, pero que sigue indignando.
Presidente Luis Abinader: no se distraiga respondiendo a los expresidentes Danilo Medina y Leonel Fernández. El pasado dolió, pero duele mucho más revivirlo ahora. La crisis de infraestructura escolar es real, evidente, y no se ha aprovechado el largo receso de verano para solucionarla. Como siempre, se perdió la oportunidad.
¿Cómo es posible que, en pleno 2025, las aulas estén en condiciones tan deplorables? No hay pupitres ni pizarras, no hay sillas, no hay abanicos, ni siquiera hay pisos terminados. Lo que sí hay son grietas, filtraciones y abandono. Es una cadena de negligencia que se arrastra y se repite como si nada.
Cada vez que inaugura un año escolar, se enfrenta al mismo escenario: escuelas sin condiciones mínimas para recibir a los estudiantes. Y mientras tanto, en vez de enfocarse en resolver esta emergencia, sigue en un debate estéril con los líderes del pasado. Presidente Abinader: no pierda más tiempo mirando hacia atrás.
Sí, los problemas de gestiones anteriores los conocemos. Los sufrimos. Pero lo más doloroso es ver que ahora, bajo su gobierno, seguimos sufriendo lo mismo. Eso es inaceptable.
El país necesita soluciones, no excusas. Nuestros niños merecen algo mejor que el abandono sistemático de su educación.