sábado, noviembre 1, 2025
Uncategorized

Celebran fallo ordena Trump financiar cupones alimentos

imagen

NUEVA YORK.- El congresista de origen dominicano Adriano Espaillat saludó la decisión de dos jueces federales de Massachusetts y Rhode Island que ordenaron a la administración Trump continuar financiando el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) —conocido popularmente como cupones de alimentos— utilizando los fondos de contingencia mientras se mantenga el cierre del gobierno.

Una de las juezas calificó como «ilegal» la decisión del gobierno de Donald Trump de suspender los beneficios de ayuda alimentaria, fallo que según Espaillat representa una victoria para millones de familias que dependen del programa.

Previo a esta decisión, Espaillat había encabezado una conferencia de prensa exigiendo a la administración Trump y a los republicanos del Congreso tomar medidas inmediatas para garantizar los beneficios del SNAP ante la inminente suspensión de fondos que afectaría a millones de hogares en todo el país.

La conferencia de prensa se realizó en la sede de la Campaña del Lado Oeste contra el Hambre (West Side Campaign Against Hunger), donde Espaillat denunció la falta de acción del gobierno federal y advirtió sobre las graves consecuencias que los recortes a los programas sociales tendrían para las comunidades más vulnerables.

«Si la administración Trump no acata esta decisión judicial, a partir de este sábado, 300,000 personas en mi distrito que dependen de los cupones de alimentos para poner comida en su mesa no recibirán sus beneficios de noviembre. Lo mismo ocurrirá con 23,000 mujeres y niños que dependen del programa WIC. La administración Trump tiene la autoridad para usar más de 5 mil millones de dólares en fondos de emergencia de SNAP, pero se ha negado a hacerlo, castigando así a las familias trabajadoras de Estados Unidos», declaró Espaillat.

Espaillat también criticó las recientes decisiones republicanas que contemplan recortes por 186 mil millones de dólares al programa SNAP y la imposición de nuevos requisitos laborales, medidas que —según estimaciones— podrían dejar sin asistencia a más de 240,000 personas solo en la ciudad de Nueva York.

«Estas decisiones no solo afectan a los hogares vulnerables, sino también a los comercios locales que dependen en gran parte de los clientes que utilizan los beneficios de SNAP. Estamos ante una crisis de proporciones sin precedentes», enfatizó.

Espaillat estuvo acompañado por el presidente del condado de Manhattan, Mark Levine; el senador estatal Robert Jackson; la concejal Carmen De La Rosa y el asambleísta estatal Manny De Los Santos, quienes expresaron su apoyo a las comunidades afectadas y a las organizaciones que combaten el hambre en la ciudad.

jt-am

Compártelo en tus redes: