
Santo Domingo.- El presidente Luis Abinader informó que se mantiene en comunicación constante con la embajada dominicana en Qatar tras los recientes conflictos en la región. Según explicó el mandatario, el impacto se ha generado en una base militar alejada de la ciudad de Doha, sin afectar las zonas pobladas por civiles, de acuerdo con los informes que maneja.
El jefe de estado destacó que el Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX) se mantiene en contacto con los dominicanos afectados y en contacto permanente con la embajada en Tel Aviv, donde algunos ciudadanos han tenido que buscar refugio debido a la situación de riesgo.
«El Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX), desde que hay una situación como esta, se acerca a los dominicanos. Nosotros estamos en contacto con la embajada de RD en Tel Aviv, sabemos que han tenido que ir a refugios y se les ha dado, desde hace un tiempo, todo el apoyo a los que no pueden por sí solos salir del país; llaman a la embajada. Lo hicimos con Ucrania y lo hacemos en cada país donde existe un riesgo», expresó Abinader.
Las Fuerzas Armadas iraníes confirmaron este lunes que habían lanzado un ataque con misiles contra la base aérea Al Udeid en Catar como represalia por los bombardeos del domingo contra tres instalaciones nucleares del país persa.
“La base aérea Al Udeid en Catar ha sido objeto de un fuerte y devastador ataque con misiles”, indicaron las Fuerzas Armadas un comunicado.
El Ejército iraní consideró esta base estadounidense como “su activo más valioso en la región”.
Anteriormente, la Embajada de la República Dominicana en Qatar informó que el país se mantenía en calma y que no se había declarado ninguna situación de emergencia tras los acontecimientos relacionados con Irán.
En un comunicado, la sede diplomática aseguró que los vuelos internacionales seguían operando con normalidad en el Aeropuerto Internacional de Hamad, e instó a la comunidad dominicana residente en Qatar, Irak y Kuwait a mantenerse informada únicamente a través de los canales oficiales del Gobierno catarí.