POR MARCELINO LARA
El monto de 50 mil millones de dólares tomado prestado no se corresponde con el escaso crecimiento de la economía dominicana en últimos cinco años.
Un crecimiento económico que ha estado por debajo del nivel potencial de la economía dominicana establecido por el Banco Central, que es del 5%.
Al analizar someramente cada una de las variables que componen el PIB, se puede confirmar que el escaso crecimiento económico dominicano ha estado sustentado, principalmente, en el aumento del gasto corriente y el endeudamiento externo.
No podemos hablar de aumento del consumo privado porque ha estado estancado y en algunos casos hasta ha disminuido.
Las familias de clase media para mantener cierto nivel de consumo han tenido que endeudarse haciendo uso de tarjetas de crédito. Eso ha disparado el costo financiero de la familia dominicana, y ni hablar de la inflación en los alimentos y los medicamentos que le drena los bolsillos.
Por su parte la inversión privada local no ha sido tan dinámica como para generar suficientes empleos que impacten positivamente el crecimiento económico y la producción nacional.
El gasto de capital ha alcanzado niveles mínimos de los últimos 60 años. Las obras de infraestructuras están en franco deterioro por falta de mantenimiento, mientras los nuevos proyectos continúan presentando retrasos en su ejecución.
Los grandes montos de importaciones han avasallado la producción nacional mientras las exportaciones son apenas el 5% del PIB.
De ahí que 50 mil millones de dólares apenas han servido para financiar el exagerado gasto corriente y financiar los grandes volúmenes de importaciones, además de pagar intereses y aumentar los subsidios como el eléctrico.
Sobre el aumento del gasto corriente y el aumento de las importaciones ha estado sustentado el anémico crecimiento económico de los últimos cinco años, con resultados adversos sobre la estabilidad macroeconómica.
El costo financiero para economía dominicana ha sido elevadisimo para lograr crecer a un nivel tan bajo, y lo peor de todo es que ese costo tan pesado lo tendrá que pagar el pueblo trabajador dominicano, por lo menos durante los próximos 100 años.
No ha valido la pena tomar tanto dinero prestados en dólares para obtener un crecimiento económico tan bajo que no permite pagar holgadamente los intereses de dicha deuda.
No ha valido la pena tomar tanto dinero prestado mientras languidece la producción nacional y crece el desempleo.
No ha valido la pena tomar tanto dinero prestado mientras retrocedemos en todos los indicadores de desarrollo humano.
No ha valido la pena tomar tanto dinero prestado mientras sube la inflación en precios de alimentos y medicinas.
No ha valido la pena tomar tanto dinero prestado mientras miles de niños dominicanos se quedan fuera de la escuela por falta de aulas.
No ha valido la pena tomar tanto dinero prestado y no construir las obras de infraestructuras necesarias para impulsar el crecimiento de la economía en los próximos 20 años.
Ha sido demasiado dinero, 50 mil millones de dólares, para obtener un escaso crecimiento económico, muy por debajo del nivel potencial de la economía dominicana que según el Banco Central es del 5%.
La exagerada deuda pública está hundiendo en el abismo al imperio económico y militar norteamericano. Que pasará entonces con la economía dominicana?
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